Comenzamos la mañana haciendo algunas posturas de yoga por grupos y acabamos con unos minutos de minfulness.
Después, aprendimos un poco sobre nuestro cerebro y los distintos tipos: el visual (la mayoría de la población), el auditivo (la segunda más numerosa) y el kinestésico (el menos frecuente, que consiste en sensaciones y emociones).
Hicimos varios ejercicios para saber cuando estábamos utilizando cada uno.
Es importante conocer las distintas maneras que tiene de aprender nuestro alumnado y combinarlas en clase para lograr una mayor adquisición de conocimiento por su parte.
Acabamos la mañana con una actividad sobre escucha activa e identificación de emociones, de modo que teníamos que contar una historia y nuestra compañera tenía que adivinar la emoción que queríamos transmitir.
Una vez terminada la teoría, nos ofrecieron movernos con el autobús para visitar una ciudad costera cercana o quedarnos en la playa y elegí la segunda. Vimos una cueva chulísima y comimos en un restaurante de dicha ciudad.
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